Historia y origen de los arcos

De hecho, es probable que los instrumentos de arco no sean más de mil años de antiguedad. Eric Halfpenny, escribió en el 1988 la Encyclopædia Britannica, y dice "Se pueden rastrear ya en la civilización islámica del siglo X ...  la técnica de tocar con arco comenzó en las culturas nómadas que estaban relacionados con la montura de caballo de Asia Central, de donde se extendió rápidamente a través del Islam y el Oriente, por lo que en 1000 d.C  había alcanzado casi simultáneamente la totalidad de China, Java, el norte de África, el Cercano Oriente, los Balcanes y Europa ". Como es sabido, dado que los arcos se hacen a partir de pelo de caballo, tiene sentido que los arcos musicales hayan aparecido por primera vez en las culturas relacionadas con la montura de caballos de Mongolia. Halfpenny observa que en muchas lenguas euroasiáticas la palabra "Bridge" (puente) significa etimológicamente "caballo", y que los chinos consideran sus propios instrumentos de arco como haber originado con los "bárbaros" de Asia Central.

La teoría de Asia Central recibe la aprobación Werner Bachmann, escribiendo en el New Grove. Bachmann observa evidencia de una pintura del siglo X de Asia Central, una pared para instrumentos de arco, en lo que es hoy la ciudad de Kurbanshaid en Tayikistán.

Las pruebas circunstanciales también apoyan la teoría de Asia Central. Todos los elementos que eran necesarios para la invención del arco eran probablemente presentes entre el caballo de Asia Central a caballo de los pueblos nómadas, al mismo tiempo:

• En una sociedad de guerreros montados a caballo, el pelo de caballo, obviamente, hubiera estado disponible.

• Guerreros a caballo de Asia Central especializada en la avanzada militar, que podría haber sido fácilmente el inventor o precursor como una forma temporal para mantener la crin a alta tensión.

• Hasta hoy, las crines se han tomado de lugares con climas fríos severos, incluyendo Mongolia, como tal, el pelo ofrece un mayor control sobre las cuerdas.

• Colofonia, que es crucial para la creación de sonido, incluso con crin gruesa, es utilizado por los arqueros tradicionales para mantener la integridad de la cuerda y para proteger el acabado del arco.

De todo esto resulta tentador imaginar de donde pudiera venir la invención del arco: algún guerrero mongol, que acaba de utilizar resina en su equipo, sin hacer nada acarició el arpa o lira con un dedo colofonia desempolvado y produjo un breve sonido continuo, lo que le llevó a tener una inspiración, con lo cual él tomó su arco, restrung con crin de caballo, y así sucesivamente. Obviamente, el grado en que esta fantasía es verdad nunca se sabrá.

Sin embargo, el arco fue inventado, que pronto se extendió ampliamente. Los pueblos de Asia Central con caballos ocuparon un territorio que incluye la ruta de la seda, por la que los bienes y las innovaciones fueron trasladados rápidamente a miles de kilómetros. Esto explicaría la aparición casi simultánea del arco musical en los muchos lugares citados por medio penique.

Durante el Renacimiento el arco sufre una transformación importante,la vara se hace más larga,  la curva se suaviza, haciéndose más plana, con esto se logra más control en la articulación y facilita la ejecuación de determinados golpes de arco. Aparece la nuez, que facilitará el tensar y destensar el arco así como evitar que las cerdas rocen la vara, al hacerse la curva más plana. En esta época la nuez es fija y extraíble, por así decirlo. Es decir, no va accionada con ningún mecanismo, las cerdas se tensan al colocar la nuez en su sitio y se destensan al quitarla.  

A finales del S. XVII encontramos un arco más plano todavía, con una punta estilizada muy característica y se empiezan a utilizar mecanismos para tensar y destensar las cerdas sin necesidad de quitar la nuez, el más común es un sistema de cremallera y, posteriormente, en el primer tercio del S. XVIII aparece el tornillo como mecanismo para tensar el arco.  

Durante la segunda mitad del S. XVIII el arco empieza a convertirse en lo que hoy conocemos. La curva se hace cóncava, la vara es más larga y aumenta el peso. Pero será Françoise X. Tourte quien, a finales del S. XVIII, sentará, a partir del arco clásico, las bases del arco moderno. Entre los grandes constructores que mejoraron el arco llevándolo a cotas insuperables se encuentran Dodd, Peccatte, Sartory, la familia Bazin, W. Retford, por citar sólo a unos cuantos.